jueves, 6 de noviembre de 2014

Y LA LLUVIA SE VOLVIO MAGENTA

Salir del hospital y solo saber que la muerte quedó sentada en modo de espera,  divide a la tragedia el capricho de ella de levantarse. Nunca estarás sola porque te sostuve los brazos y piernas mientras pateabas y lanzabas puños al aire, la aguja dibujó en tu brazo en años de compulsiva y lagrimal tradición.

Azul nunca tuviste el cabello, pero siempre te imaginé empapada de ese color, ya en el nombre o en el fondo no lo podías negar, tú me salvaste cuando narcotizado tomaste la rosa que e conectaba a la realidad, primero con miedo y reserva, después con afecto tomabas mi mano mientras el ojo magenta abierto en el error vigilaba mis sueños anormales.

Así bajo la lluvia, como cuando nos sometimos jadeantes, te miro desde la ventana, y si volteas verás las sonrisas que me pidas bajo el árbol, que mis cabellos toquen los hombros llenos de agua, y de reojo lanzaré miradas retadoras a esa que espera el momento de tomarte para siempre.

De ser así en tu memoria te llevarás mi brazo izquierdo, pues te pertenece llévatelo, muérdelo y cuídalo allá, que cada que llueva las gotas que bajen por mi rostro serán del color del ojo dañado, no tengo intenciones de moverme.


                                                                AUTOR: VICTOR VAMPIRO NEKRO


TANTO POR HACER DEL UNIVERSO

Condúceme a una galaxia desorbitada
y enséñame tu pecho sin permitirme sobarlo.
Llévame a un torbellino de plasma
y húndeme en él de la mano.
Juguemos a ser relámpagos.

Regálame uno de tus cabellos
y tiremos con él de un sol para colapsarlo.
Fundamos el hielo de Saturno
comiéndonos el cuello
sentados en un anillo suyo.
Veamos desfilar los cometas
mientras me dices al oído
que todo lo que queremos es nuestro,
que el amor no reconoce pasado o futuro.

Si yo - nebulosa triste - me canso,
beberé con ojos cerrados de alguna cascada
que brote justo en medio tuyo.

Hay cielos pizarrosos, azules constelaciones,
planetas de escarcha por explorar.
Vamos, toma un caballo de luz
que hay tanto por hacer del universo.
Coge de entre ellos cual tenga ojos de alba,
dientes de luna, el pelaje más terso.


                                AUTOR: ALEQS GARRIGOZ


RAW

En la oscuridad encuentro el temor de perderte,
y me abrazo al recuerdo de tus labios amoratados por los años,
lastimados por los malos amantes y por los buenos,
me aferro a una distancia de tu lacerada y blanca piel.

En esta temible ligereza de mis sueños,
me encuentro saboreando tu eterno desprecio,
me enloquece tu terquedad de siempre quedarte,
me enfurecen los besos melancólicos que se tiran al aire.

Quiero que me tomes entre tus manos húmedas y violentas,
arráncame la piel de l a cara, de mis pechos, de mi entrepierna,
lámeme con tu delicada y áspera lengua el corazón abierto por los golpes del
destino, ámame cruda y cadenciosamente, como la primera vez que te imaginé
siendo mío.

                                                                           Ingrid Rohe.