jueves, 28 de febrero de 2013

MI PEOR TEMOR


Cuando se está en la cuerda floja y hacia abajo solo espera el fin, y del otro lado alguien con el arma esperando por ti, el fin no está tan mal, que se pudra el equilibrio.

Morí y desperté, entonces se convirtió en anécdota y platica interesante, y en la siguiente mañana morí despierto y ya quedarme dormido me parece insípido.

Sí me hacías enojar, más bien encabronar, pero a la segunda y tercera ya se venía esperando, y se adivinaba que lo volverías a hacer, entonces lo que quedaba fue ignorar, pues así ya el temor de enojar se cristalizó en el pavor de que me dejaste de interesar al punto de que me da igual.

Renacer o reencarnar, ya no hay miedo de lo que ocurra, pues la ansiedad es solo un recuerdo en contemplación de ya no saber respirar.

Y antes de el destello y parpadeo que me retorne al ritual de lo normal, si me voy allá me quedo, no quiero ser foca, pues las orcas y los tiburones destazan a las focas, y los pingüinos son la única ave que no puede volar, así mismo la única que puede nadar, no quiero ser pingüino pues los osos, humanos, orcas y tiburones aniquilan a los pingüinos.

                                                                                             VICTOR NEKRO


TANTO CUANTO COMO HUMANO QUIERO


Ni dejar un legado de textos decadentes,
ni un corazón destrozado detrás.
No necesita ser de forma aparatosa;
a nadie le importaría además.

Desaparecer. Tan sólo desaparecer.

Ni una colección de cintas que heredar
ni una sucia foto mía en un muro:

desaparecer, tan solo desaparecer

y dejar de jugar al poeta oscuro.

                                   ALEQS GARRIGOZ


LAND


LAND

Caliente y pesado es este sueño,
Esta tierra húmeda y lejana me abruma,
Es mi hogar y mi prisión,
Me hace el amor ha cambio de destrozar cualquier esperanza.

Cruel y tranquilizante me ha extendido su mano,
Es Blanca y tersa, traicionera perversa!
Lengua de mil fuegos y cortos significados,
Quiero embriagarme en tus aguas doradas, morirme arropada bajo tus lunas.

Frío y pesado este Corazón que ya no es mío,
Una cara que no puede ocultar su pasado,
Un odio amoroso que me ha infectado,
Reptiles que me tocan violentamente con las miradas.

Voy a robarte un espacio cuando menos te des cuenta,
Tu pondrás tus manos sobre mi cuello, y yo mis piernas sobre tu tierra,
Jadeantes nos haremos compañía,
Al final seré esclava de una isla indeseada.

                                                                       Ingrid Rohe.